martes, 26 de octubre de 2010

Qué constituye el patrimonio paceño según el Gobierno Autónomo Municipal de La Paz

Recientemente la Oficialía Mayor de Culturas del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz a dado a conocer el programa de lo que se ha venido a denominar "Octubre Patrimonial", presentando una serie de actividades relacionadas principalmente con la entrega de placas a inmuebles patrimoniales, la limpieza de estatuas y bustos en plazas citadinas y la presentación oficial del producto "estrella" de la Oficialía: la escuela taller, financiada con fondos de cooperación y formadora de aprendices especializados en conservar el patrimonio arquitectónico; una tarea loable esta última si no presentase como gran impedimento la imposibilidad legal y económica -por parte de la comuna paceña- de intervenir en inmuebles de propiedad privada.
Este raquítico panorama del acontecer patrimonial en La Paz, nos permite comprobar, una vez más, la mirada microscópica con la que el Gobierno Municipal de La Paz viene encarando la administración del Patrimonio cultural: priorizando el ornato público y los espectáculos folcklóricos o de belleza.
Mientras los impuestos de la ciudadanía se desperdician en afiches propagandísticos y eventos de inauguración, el patrimonio cultural y natural del municipio paceño se va perdiendo poco a poco.
Desde hace más de diez años somos testigos de la rauda destrucción masiva de sitios arqueológicos de más de 3.000 años de antiguedad; áreas funerarias, domésticas, viales, agrícolas y ceremoniales prehispánicas son arrasadas por nuevas edificaciones instaladas en zonas de preservación natural o de riesgo, siendo avaladas por el propio municipio.
Inclusive existen áreas arqueológicas monumentales cuya presencia es considerada por la gobernación como un impedimento para el desarrollo municipal, que proyecta su crecimiento urbano y turístico en una zona de reserva natural (!!!!!!), de capital importancia para la conservación por constituirse en el mayor reservorio de agua dulce para la mitad de la población paceña.
Cada día, infinidad de archivos y documentos (patrimonio documental de La Paz) son lanzados sistemáticamente a la basura, por falta de espacio para almacenamiento, fondos para catalogación e interés de preservación de la memoria institucional y pública.
Áreas ceremoniales importantes como las Apachetas (que constituyen una parte activa del imaginario y ritualidad del pueblo) son destruidas de manera abusiva para implementar "miradores turísticos" que, dicho sea de paso, no son visitados por nadie debido a su inaccesibilidad y lejanía. A pesar de ello, yatiris y amautas son obligados a abandonar sus áreas ceremoniales, ritos y costumbres, teniendo que conformarse con mirar con añoranza sus sitios sagrados, distorcionados por una visión retrógrada y equivocada de progreso y estética urbana. Esto sin mencionar, los peligrosos y cada vez más constantes conflictos entre vecinos, yatiris, subalcaldes y religiosos fundamentalistas, por el derecho al uso del espacio público.
Zonas de preservación por su interés histórico (como el ex Gran Jardín de la Revolución) son avasalladas constantemente por asentamientos humanos clandestinos que logran "regularizar" su situación a manos del propio Gobierno Autónomo Municipal de la Paz.
Ni que decir de la Áreas Protegidas Naturales Municipales; de las 27 consignadas, muchas dejaron de existir debido a la invasión urbana, la cual "desmonta" literalmente cerros enteros para implementar nuevas urbanizaciones fuera de norma, pero que se regularizan habilmente para comodidad administrativa municipal y para peligro poblacional, debido a la inestabilidad de los terrenos.
En este mismo tenor podemos expresarnos del patrimonio paleontológico, artístico y artesanal, los mismos que ni siquiera son tomados en cuenta en el "panorama patrimonial" del Gobierno Municipal.
Desde esta perspectiva consideramos que mientras las autoridades ediles sigan haciéndose de la vista gorda frente a la DESTRUCCIÓN CONSENTIDA del amplio bagage que compone el Patrimonio Cultural y Natural del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz, un "Octubre Patrimonial" no constituirá nada más que una bufonada mediática para hacer creer a la población que la Oficialía Mayor de Culturas se esta ocupando de algo.

martes, 5 de octubre de 2010

V Reunión Anual de la Sociedad de Arqueología de La Paz

CONVOCATORIA

V REUNIÓN ANUAL DE LA SOCIEDAD DE ARQUEOLOGÍA DE LA PAZ

SALP-2010


La Paz: 18 y 19 de noviembre de 2010




En el marco de las nuevas modificaciones constitucionales, el vacío legal que su aplicación implica en términos administrativos a nivel regional, y la crisis institucional por la que esta pasando la arqueología boliviana, planteamos foros de discusión que nos permitan primero evaluar el estado de la formación académica, su orientación, compromiso social y la calidad profesional de los investigadores para responder a diferentes ámbitos en el panorama arqueológico, cultural y social.

En este contexto, se considera analizar el rol de los centros de investigación en la práctica arqueológica a nivel nacional, el centralismo administrativo y las rupturas que se generan entre regiones en términos de investigación, publicación y gestión de áreas arqueológicas.

Paralelamente se propone discutir las nuevas políticas gubernamentales en torno a descentralización de competencias administrativas por unidad territorial, un tema candente actualmente, que presenta como caso tipo el lamentable modelo de la administración de uno de los sitios arqueológicos más importantes del occidente boliviano: Tiwanaku.

En este contexto, la implementación descontrolada de cartas orgánicas y estatutos autonómicos han demostrado en un tiempo relativamente corto, atentar de manera incuestionable contra la conservación del patrimonio arqueológico, cultural y natural.

A raíz justamente de la nueva coyuntura económica, política y social se presenta un panorama complejo que prioriza la promoción del patrimonio arqueológico como recurso, potenciándolo muchas veces como motor de desarrollo económico comunal.

Finalmente se presenta una mesa de trabajo que permita la exposición y discusión de nuevos resultados de investigación arqueológica en el territorio boliviano.

Temas y mesas de trabajo

Con el objetivo de contribuir al debate sobre el estado actual de la disciplina arqueológica en el ámbito académico, laboral e institucional, se ha optado por la implementación de 4 mesas de trabajo cerradas, las cuales abordaran las variantes de cada uno de los temas propuestos bajo la guía de un moderador.
Los temas a considerar son:

Políticas gubernamentales en torno a la gestión del patrimonio arqueológico y cultural
• NCPE
• Cartas orgánicas
• Estatutos autonómicos
• Proyectos de ley
• Instancias administrativas del patrimonio
• Reglamento de arqueología
• Protocolos de investigación

El rol de los centros académicos en la práctica arqueológica
• Investigaciones
• Institutos de investigación
• Escuelas de campo
• Museos universitarios
• Programas de estudio acordes a la realidad nacional

Centro y periferia: la descolonización de la investigación
• Decisiones y competencias territoriales en torno al patrimonio arqueológico
• Descentralización y autonomías
• Perspectivas de la teoría en arqueología
• Circuito de publicaciones, quienes nos leen y donde

Patrimonio cultural y desarrollo social
• Turismo cultural y comunitario
• El patrimonio como recurso
• Universidades indígenas

Avances de investigación en arqueología
• Resultados de proyectos de investigación desarrollados recientemente, los mismos que deberán ser abordados desde la perspectiva de alguna de las temáticas propuestas.

Modalidad

El evento se llevará adelante mediante la implementación de mesas de trabajo temáticas, durante las cuales se presentarán cada una de las disertaciones para luego dar paso a la discusión de las mismas.

Requisitos de participación

Por tratarse de un evento cerrado podrán participar todos los socios de la Sociedad de Arqueología de La Paz e invitados especiales.

Expositores

Enviar título y resumen de las ponencias (no exceder las 200 palabras) hasta el 30 de octubre del año 2010, debiendo especificar el soporte tecnológico requerido para su presentación.

Cada expositor contará con 15 minutos de exposición.

Fechas clave

- 30 de octubre: Fecha límite de envío de resúmenes
- 18 y 19 de noviembre: Desarrollo del evento

Inscripciones y Contactos

Quienes deseen participar deberán enviar sus resúmenes y datos de contacto a las siguientes direcciones electrónicas:

• Comisión Científica y de Patrimonio Arqueológico SALP: comisiónpatrimonio@gmail.com
• Sociedad de Arqueología de La Paz: sociedadarqueologíalp@gmail.com.

martes, 6 de julio de 2010

Propuesta SALP para la inclusión del tema Patrimonial en la Ley Marco de Descentralización y Autonomías


En atención a que el Ministerio de Autonomías de Bolivia, viene elaborando desde el pasado año 2009 la Ley Marco de Autonomías y Descentralización (la cual constituye un instrumento normativo que articulará la nueva Constitución Política del Estado Plurinacional Boliviano con los Estutos Autonómicos y las Cartas Orgánicas Municipales), la Sociedad de Arqueología de La Paz elaboró y entregó en el mes de abril del presente año, una propuesta de inclusión de lineamientos generales para la gestión, conservación y protección del Patrimonio Arqueológico y Cultural, la misma que fue incorporada en el actual proyecto de Ley Marco presentado al Congreso por el Ministerio, y que se desarrolla a continuación:


PROPUESTA DE INCORPORACIÓN DE PATRIMONIO CULTURAL EN LA LEY MARCO DE AUTONOMÍAS Y DESCENTRALIZACIÓN
Sociedad de Arqueología de La Paz
Lineamientos generales



Prefacio
En el marco de las nuevas modificaciones constitucionales y el vacío legal que su aplicación supone en términos administrativos a nivel regional, se plantea la necesidad imperiosa de desarrollar un corpus legal, que delimite la transferencia de competencias desde el nivel central del estado y las áreas de alcance competencial en el marco constitucional.



En este contexto se propone discutir las nuevas políticas gubernamentales en torno a la descentralización de competencias administrativas por unidad territorial sobre el patrimonio arqueológico y cultural, esto en consideración a que las labores de conservación y promoción de este patrimonio se presentan como competencias privativas del nivel central del estado (CPE art. 298), y paralelamente como competencias exclusivas de las unidades territoriales en su jurisdicción.



Desde esta perspectiva, la implementación descontrolada de cartas orgánicas y estatutos autonómicos han demostrado en un tiempo relativamente corto, atentar de manera incuestionable contra la conservación del patrimonio arqueológico, cultural y natural .
En atribución a ello es que la Sociedad de Arqueología de La Paz plantea lineamientos básicos para la gestión responsable del Patrimonio Cultural en el ámbito de la Ley Marco de Autonomías y Descentralización. A saber:



Artículo xx. Patrimonio cultural.


1. Son competencias del nivel central del Estado:


a) Disponer las acciones necesarias para la protección, defensa, enajenación, prohibición de traslado y destrucción, conservación y promoción del patrimonio cultural.
b) Definir, supervisar y financiar la creación de Áreas de Preservación o Protección Nacional para preservar o resguardar yacimientos, monumentos o bienes arqueológicos, en virtud de su valor arqueológico, patrimonial o potencial turístico.
c) Elaborar y ejecutar políticas culturales para la adecuada gestión del patrimonio cultural.
d) Formular y aprobar la Ley de Patrimonio, para regular las actividades relacionadas con el patrimonio cultural, histórico, documental, artístico, monumental, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, científico, tangible e intangible.
e) Desarrollar el Plan sectorial de culturas, en concordancia con el Plan Nacional de Desarrollo.
f) Autorizar, fiscalizar y supervisar los fondos destinados a investigación, conservación y promoción del patrimonio cultural.
g) Establecer convenios bilaterales y multilaterales para la conservación, protección y aprovechamiento del patrimonio cultural.


2. Son competencias de los gobiernos departamentales autónomos en su jurisdicción:


a) Elaborar normativas departamentales para la protección, conservación y promoción del Patrimonio Cultural en concordancia con lo establecido por la Ley de Patrimonio.
b) Desarrollar y ejecutar políticas culturales departamentales para la adecuada gestión del Patrimonio Cultural.
c) Proteger y conservar el patrimonio cultural, histórico, documental, artístico, monumental, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, científico, tangible e intangible.
d) Declarar, supervisar y financiar entidades culturales como Patrimonio Cultural departamental.
e) Promover el desarrollo de instancias de investigación departamentales en el ámbito cultural.


3. Son competencias de los gobiernos municipales autónomos, en su jurisdicción:


a) Desarrollar reglamentos y normas para la protección, conservación y promoción del Patrimonio Cultural, en el marco de la Ley de Patrimonio, y en concordancia con las normativas departamentales.
b) Formular y ejecutar políticas culturales municipales en consideración a las atribuciones y responsabilidades que le asigna la CPE respecto a la protección, conservación y promoción del patrimonio cultural, histórico, documental, artístico, monumental, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, científico, tangible e intangible.
c) Regentar el empleo responsable del patrimonio cultural municipal que sea considerado como recurso turístico o científico, empleando los medios necesarios para asegurar su conservación y la concientización de la población.
d) Diseñar e implementar un modelo de planeamiento y desarrollo urbano y rural que propenda a la recuperación del carácter histórico, la identificación y conservación de su patrimonio arqueológico y la manutención de sus cualidades culturales y naturales.
e) Promover el desarrollo de instancias de investigación municipales en el ámbito cultural.


4. Son competencias de las autonomías indígena originaria campesinas:


a) Formular y ejecutar políticas culturales en consideración a las atribuciones y responsabilidades que le asigna la CPE respecto a la protección, conservación y promoción del patrimonio cultural, histórico, documental, artístico, monumental, arquitectónico, arqueológico, paleontológico, científico, tangible e intangible.
b) Elaborar y ejecutar reglamentos y normas para la protección, conservación y promoción del Patrimonio Cultural, en el marco de la Ley de Patrimonio y las características culturales propias.
c) Promover el desarrollo de instancias de investigación en el ámbito cultural, en el marco de su jurisdicción.

martes, 16 de marzo de 2010

Negociando con el patrimonio cultural

En la lógica del turismo todo es vendible y ofertable, sólo hay que inventarse una oferta y pretender que puede existir una demanda.

Desde hace algún tiempo en Bolivia el turismo cultural ha cobrado impulso , proliferando sin cesar emprendimientos locales implementados por comunidades y manipulados por ONG´s, investigadores de turno (que especulan para obtener financiamientos) y recientemente instituciones públicas.

La falsa premisa de desarrollo rural no agrícola (vendida cínicamente por la UNESCO entre otras instancias) se ha posicionado raudamente entre poblaciones mal informadas, municipios corruptos y comunidades paupérrimas.

Como resultado nos hemos visto rodeados de emprendimientos locales que fracasan sin cesar dejando conflictos inter-comunales; gastos onerosos que no pueden ser salvados por los municipios; ofertas turísticas para las que no existe demanda pues se encuentran fuera de los circuitos turísticos; destrucción de áreas de preservación natural a nombre de "turismo de aventura"; destrucción de áreas arqueológicas bajo la excusa de implementación de museos regionales (que no son otra cosa que meros depósitos); conflictos comunales de impacto y capacidad; entre muchos otros.

No es casualidad que en nuestro país sólo existan unos cuantos emprendimientos comunales exitosos (Sajama, Chalalán, Mapajo, por mencionar algunos) mientras que el resto se fueron diluyendo cuando cayeron en cuenta tardíamente de que no todo es ofertable, y de que se requiere algo más que un paisaje espectacular, fauna y flora únicas y restos arqueológicos para entrar en el globalizado mundo del turismo comunal.

En regiones donde se carece de agua, luz, infraestructura y accesos viales las ofertas pueden no ser atractivas, los turistas pueden no llegar nunca y el desarrollo prometido queda sólo en eso: promesas.

Aunado a esto se presenta el grave problema de la inexistencia de políticas culturales que garanticen la preservación y conservación del patrimonio natural y cultural antes que la promoción de los mismos.

Por otro lado no se implementan estudios de impacto y capacidad ni del medio ni de la población, dejando como corolario comflictos ambientales y culturales difíciles de sobrellevar (sólo recordemos como pátetica anécdota la toma del aeropuerto de la Isla de Pascua en Chile por parte de los isleños -a finales del pasado año-, en protesta por la "invasión" descontrolada de turistas y la proliferación de hoteles y alojamientos).

El turismo comunal se vende indiscriminadamente y es el propio estado quien lo está impulsando, sin caer en cuenta de que la oferta de "lo único, lo propio y lo particular" no es más que la nueva visión globalizada del desarrollo regional sin responsabilidad.

miércoles, 10 de marzo de 2010

SOCIEDAD DE ARQUEOLOGÍA DE LA PAZ. VOTO RESOLUTIVO

Frente a los últimos acontecimientos suscitados en torno a la intervención de la Unidad Nacional de Arqueología y el Museo Nacional de Arqueología (entidades dependientes del Ministerio de Culturas), a raíz de las reiteradas denuncias realizadas por autoridades civiles y políticas de Tiwanaku, la ciudadanía en general, los actores culturales y nuestra propia organización; alertando oportunamente sobre la corrupción, el tráfico de influencias, la pérdida de material arqueológico, el apropiamiento indebido de información documental arqueológica y la negligencia en el cumplimiento de funciones de las instituciones intervenidas. La Sociedad de Arqueología de La Paz, reunida en su primera Asamblea General Anual ha emitido el siguiente voto resolutivo:
1. Apoyar la Intervención que ha llevado adelante la Sra. Ministra Zulma Yugar como medida necesaria para ordenar la primera institución nacional a cargo de las políticas arqueológicas del País, instando a que esta acción se lleve a cabo con la mayor transparencia posible y en el marco de las Leyes que rigen tanto el patrimonio nacional como los derechos humanos y ciudadanos.
2. Respaldar con un voto de confianza el trabajo que viene cumpliendo como Directora Interina de la Unidad Nacional de Arqueología nuestra asociada María Soledad Fernández, cuya trayectoria académica y profesional se enmarca en los cánones de ética e integridad, que tanto nuestra Sociedad como la propia práctica arqueológica demandan de los profesionales de esta disciplina.
3. Apoyar moral y materialmente a nuestros asociados Rúden Plaza Martinez, Velia Mendoza, José Luís Paz Soria y Adolfo Perez, sobre cuyo trabajo la Sociedad de Arqueología de La Paz expresa su mayor confianza.
4. Solicitar al Ministerio de Culturas y Ministerio de Transparencia la incorporación de la Sociedad de Arqueología de La Paz en las labores de monitoreo de la Comisión de intervención a la UNAR y MUNARQ, a fin darle mayor transparencia al proceso y participación a los actores culturales y sociales que están realmente interesados en el esclarecimiento de las denuncias y el cumplimiento de las leyes que prescriben los delitos en contra del patrimonio cultural y arqueológico boliviano.

La Paz, 5 de marzo del 2010

martes, 23 de febrero de 2010

La muerte del patrimonio cultural o el negocio del turismo

La lamentable sobrevaloración que se realiza del turismo cultural, principalmente en los denominados paises tercermundistas, determinó que el patrimonio cultural se subsuma forzadamente a los requerimientos de la nueva génesis del desarrollo, atribuyendo así a los bienes arqueológicos un nuevo rol en el panorama socioeconómico local.

Bolivia como es de preveer no es la excepción, y durante los últimos diez años se ha dedicado a asumir e impulsar la concepción del patrimonio como recurso, desarrollada por la UNESCO, la OEA y la ONU en su marco de políticas regionales de desarrollo cultural.

Desde esta perspectiva la inexistencia de políticas culturales para la protección y conservación del patrimonio; la carencia de normativas regionales que posibiliten una adecuada administración y gestión de los bienes culturales; la falta de especialistas en esferas gubernamentales que "gocen" de conocimiento y experiencia en temas patrimoniales; la ausencia total de estudios de impacto y capacidad para la implementación de programas turísticos, no parecen constituirse en una limitante para que cada nueva autoridad que es "apoltronada" en la silla ministerial de culturas considere que el turismo es la panacea del desarrollo y que el patrimonio en este marco es vendible, ofertable o caso contrario desechable.

En este contexto, hemos sido testigos de la destrucción indiscriminada de sitios arqueológicos a manos de comunarios y pobladores (quienes eran engañados por la falsa promesa de la industria sin chimeneas) que buscaban demostrar sus atractivos turísticos al mundo. Fruto de esta concepción distorcionada e impulsada por las propias autoridades, es la destrucción de sitios arqueológicos invalorables como Conchamarca o Lacaya, por mencionar sólo unos pocos.

Durante los últimos cuatro años el Vice Ministerio y luego Ministerio de Culturas a impulsado, apoyado y promovido la destrucción de sitios arqueológicos a guisa de promoción del patrimonio, y en el desarrollo de este experimento no se inmutó en ofertar al sitio arqueológico de Tiwanaku, dejando como daño colateral la desestabilización de la pirámide de Akapana y el anegamiento de piezas invalorables, atestadas en un museo construido en un área inundable.

Recientemente y con mucha desazón vimos la designación de la cantante Zulma Yugar como nueva Ministra de Culturas, y con mayor preocupación comprobamos que su primera labor en el cargo fue trasladar el Viceministerio de Turismo a Culturas...para muestra un botón.

El programa de trabajo que parece marcar el norte de la nueva Ministra esta delineado por el desarrollo turístico y la muerte del patrimonio arqueológico, ya sea porque éste último es promocionado sin control en aras de la captación de fondos (hablemos claramente de veinte millones de dólares) o caso contrario no es considerado como un tema prioritario para el estado frente al folklore o la realización del Miss Universo en Bolivia.

Es claro preveer que con la designación de autoridades de turno que poco o ningún conocimiento y experiencia poseen en temas patrimoniales y administración de bienes culturales, el patrimonio arqueológico y cultural está más desamparado que nunca.

La selección de prerrogativas de la administración Yugar debería considerar en primer instancia el planteamiento de políticas culturales que tiendan a la protección y conservación, antes que a la promoción del valioso patrimonio cultural que poseemos, ya que si bien desde la tiránica perspectiva económica del turismo el patrimonio cultural es un recurso, no debemos olvidar que es un recurso NO RENOVABLE y como tal señora Yugar su valor es incalculable.